18-09-2015
Así, enseña lo esencial para la realización del amor en la pareja, en la paternidad, en la filiación, en las relaciones con los demás y c on nosotros mismos: el bienestar se asienta en el respeto al orden sutil de los sistemas familiares y en el logro del amor en nuestros vínculos. En ellos descansamos y logramos sentirnos plenos, cuando todos aquellos que forman parte de nuestra familia tienen un lugar en nuestro corazón, sin exclusiones. Esto requiere dar el salto desde la conciencia estrecha, que se orienta según criterios de buenos y malos, hacia el profundo abrazo al misterio de la vida tal como es y a todas las personas tal como son. El autor lo denomina `tomar más allá del bien y del mal´. Felicidad que permanece apasionará a todos los lectores interesados en comprender profundamente lo que nos hace felices, en una singular aproximación que prescinde de cualquier retórica intelectual para concentrarse en las dinámicas familiares que encierran la semilla del sufrimiento, con el objetivo de transformarlo en alegría y fuerza al servicio de la vida. Así, esta obra se convierte en imprescindible para todos aquellos que se han expuesto a la conmovedora vibración de las Constelaciones Familiares y que, ya como profesionales o como interesados, se sienten intrigados por su futuro: un futuro en sintonía con el espíritu o -como se afirma en la última frase del libro- `un futuro espiritual´.